Las redes sociales son algo ya instaurado en nuestra vida y, para los más jóvenes, es toda una fuente de emociones, noticias y modas a seguir e imitar, aunque en ocasiones, estas resultan dañinas para la salud.

Hemos visto algunas prácticas muy dañinas, como el limado de dientes en casa o promover el blanqueamiento de dientes con productos poco recomendables y sin ningún tipo de supervisión, y ahora nos llega una nueva tendencia que busca ejercitar la mandíbula para modificar su aspecto.

Estos hombres influencers introducen en la boca un pequeño aparato para morderlo y conseguir ensanchar la mandíbula, buscando perpetuar estereotipos de género y vetustos cánones de belleza inalcanzables.

Nuestra mandíbula ya se ejercita de un modo natural a lo largo del día cada vez que masticamos, por lo que, si la sobreexponemos a un esfuerzo extra, como el morder este aparato a lo largo del día, provocamos un movimiento totalmente artificial que puede repercutir negativamente en nuestra salud y, además, los cambios que realiza son irrisorios.

Al morder estos dispositivos, se produce una hipertrofia del músculo masetero, el responsable de la masticación y pone en peligro la articulación temporomandibular al forzar la masticación. Esto consigue que la articulación realiza sobreesfuerzos, provocando dolores de cuello y de la misma articulación, así como la aparición de chasquidos articulares, contracturas de los músculos relacionados con la masticación y posibles problemas en los dientes.

El peligro de estas prácticas radica en la facilidad de acceso a la compra de estos dispositivos, pero lo que los hace realmente peligrosos, es el gran altavoz que estos prescriptores de moda tiene sobre adolescentes y niños en pleno desarrollo, así como en adultos con problemas de percepción personal, por lo que siempre que se desee iniciar algún tipo de acción o tratamiento para modificar cualquier aspecto de nuestra boca, hay que contar con un buen profesional que realice un estudio previo del caso y recomiende la mejor solución posible.